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viernes, 30 de diciembre de 2011

La influencia de la literatura en la música Rock

E.A. Poe, influencia del Rock
A pesar de que la música Rock, entendida esta en un sentido amplio, siempre se ha visto estigmatizada y calificada por un sector intelectual, como una música banal, inmadura y casi infantil, muy lejos de las grandes manifestaciones artísticas y por supuesto de la denominada música clásica, podemos encontrar en muchas de sus letras la influencia de grandes nombres de la literatura que van desde George Orwell, Edgar Allan Poe o Herman Hesse hasta Homero o Dante Alighieri, obligando en muchos casos a cuestionar la supuesta vacuidad de este género musical.


La música Rock nace como una manifestación de rebeldía juvenil pero evoluciona

Cierto es que la música Rock, nacida a finales de los años 40 como un compendio de diversos géneros populares, surgió como un grito de rebeldía juvenil ante un encorsetado panorama cultural y social, pero como todas las manifestaciones artísticas, ha sufrido una evolución en cuanto a la complejidad de sus estructuras dejando patente que ya no puede considerarse exclusivamente como un género adolescente, sino que tomando entidad propia, se ha constituido como la manifestación artística y cultural más importante y definitoria del siglo XX.

William Blake, influencia evidente en el Rock
Lejos queda ya la imagen refinada del músico y del aficionado a este arte, pues artistas de vida y maneras excéntricas y descuidadas como Jim Morrison, Alan Parsons, Bob Dylan y llegando a territorio patrio, Joaquín Sabina o Enrique Bunbury, no sólo poseen un imaginario propio que florece en sus canciones y acerca su obra a la literatura más clásica, sino que han reconocido ser ávidos lectores y sentirse influenciados por nombres como Oscar Wilde, H. G. Welles o William Blake.

Así y por ejemplificar en la figura de alguno de los antes mencionados, podemos descubrir que el disco de 1976 del grupo The Alan Parsons Project, titulado "Tales of Mystery and Imagination", es una revisión musical a varias de las obras de Edgar Allan Poe como "El Cuervo", "El Corazón Delator" o "El Sistema del Dr. Tarr y el Profesor Feather"

Jim Morrison, poeta, y lector ávido
Y es imprescindible mencionar a la banda de The Doors y a su carismático líder y poeta, Jim Morrison, puesto que las referencias y menciones expresas a literatos se encuentran hasta en el nombre del grupo ideado a partir de un ensayo del mencionado Aldous Huxley sobre la mescalina, componente activo del peyote ("Las puertas de la percepción") que a su vez se basaba en una frase del inglés William Blake, "Si las puertas de la percepción fueran depuradas, todo aparecería ante el hombre tal cual es: infinito".

La lista podría ser interminable, por ejemplo encontramos a Noam Chomsky en el Electioneering de Radiohead, a Albert Camus en el Killing an Arab de The Cure, a la famosa Lolita de Nabokov en el Don't Stand so Close to Me de The Police o yendo a grupos del estilo Heavy Metal como Metallica o Iron Maiden, hallamos referencias a Tennyson, Poe, Lovecraft, Umberto Eco o el mismísimo Hemingway en gran parte de su obra.


La música Rock es susceptible de ser considerada literatura 

Bob Dylan, premio Pulitzer y nominado al Nobel
Por lo dicho, en ocasiones sin incidir en la cada vez más compleja estructura armónica e interpretativa de muchos de los grandes músicos de Rock, es conveniente acercarse a su obra sin ningún tipo de prejuicio y darse cuenta de que bajo sus letras subyace una riqueza cultural y artística a veces ignorada.

Como ejemplo más evidente, nos encontramos al mítico Bob Dylan, nominado al Premio Nobel de literatura por su obra y ganador de un Pulitzer honorario en 2008 o al gran Leonard Cohen, que compagina su carrera literaria con la musical y que recientemente ha sido galardonado con el premio Principe de Asturias de las Letras.
Leonard Cohen, Premio Príncipe de Asturiasde las Letras

Por supuesto no todo el Rock es literatura ni posee una calidad que lo convierta en un bien artístico, pero démonos cuenta que Salieri no era Mozart, ni toda la denominada música clásica ha de ser venerada como ejemplo de arte.



En la actualidad existen músicos virtuosos del como Steve Vai o Yngwie Malmsteen que desarrollan una complejidad técnica a la altura de Paganini o las composiciones de Beethoven.

Seguramente si Mozart viviera en esta época crearía obras como el Bohemian Rapsody de Queen o el For the Love of God del mencionado Vai.

Como consejo, es necesario utilizar el sentido crítico a la hora de examinar cualquier obra artística, pero que este sentido crítico no sea una barrera que nos impida detectar la calidad y el valor de muchos de los músicos que han adornado con sus notas y letras el Siglo XX y el principio del XXI y que sin ninguna duda, serán estudiados por generaciones futuras, al igual que nosotros estudiamos y admiramos a Vivaldi, Bach o Chopin. 



 

jueves, 22 de diciembre de 2011

Eddie Cochran, el genio que casi eclipsa a Elvis Presley

Eddie Cochran
Eddie Cochran fue considerado por el mismísimo Elvis Presley, como el único músico capaz de arrebatarle la corona de Rey del Rock y es un hecho que si su muerte no hubiera sido tan prematura, la historia del Rock ´n Roll sería muy distinta.


Eddie Cochran, el virtuoso de la guitarra y el músico excepcional

Nacido con el nombre de Edward Ray Cochrane en Albert Lea, (Minnesota) el 3 de octubre de 1938 sintió desde bien pronto la llamada de la música aprendiendo en sus años de infancia a tocar el trombón.

Pero la inquietud que siempre estuvo patente en la personalidad de Cochran, le llevó a experimentar con diferentes instrumentos musicales y técnicas en la búsqueda de sonidos nuevos y en muchos casos adelantados para su época.

Sus inicios como músico profesional se vieron en los acordes de la música country que interpretaba y componía en "The Cochran Brothers" en 1955, pero su intervención como telonero de un joven Elvis Presley en el Big D Jamboree de Dallas ese mismo año, hace que decida que su sonido y su carrera ha de orientarse al  Rockabilly, más dinámico, cargado de optimismo y orientado a una juventud que necesitaba una forma de expresar sus sentimientos.


El Big D Jamboree de 1955 marca el punto de inflexión en la carrera de Eddie, no solo por su decisión de inciar un nuevo sonido, sino también porque una figura ya consolidada como era Elvis Presley, comienza a fijarse en su virtuosismo y presencia escénica.
Gretsch Chet Atkins 6120, la guitarra de Eddie Cochran
Así, mientras la guitarra de Elvis Presley en los conciertos era poco más que un adorno, el joven Cochran, de apenas 17 años, era capaz de cantar y moverse sobre el escenario a la vez que interpretaba con el instrumento partes rítmicas y solos de guitarra de una calidad y complejidad que solo alcanzaban unos pocos músicos de estudio de la época.

Su virtuosismo llegaba a tal punto que en varios de sus discos, grabó las pistas de cada uno de los instrumentos intervinientes en las canciones, además de llegar a experimentar con diversos sonidos y técnicas de grabación teniendo como un ejemplo evidente la combinación de bajo y batería con chaston semiabierto en el tema Somethin' Else, alejándose de esa manera de la pretensión de los músicos de la época de tratar conseguir en el estudio el sonido en directo de la banda.


Eddie Cochran, creador de clásicos del Rock

Elvis Presley se sentía intimidado ante Eddie Cochran
A pesar de la brevedad de su carrera musical, dejó para la historia piezas que se consideran verdaderos clásicos de la música Rock como el mencionado Somethin' Else, Summertime Blues o el versionado hasta la extenuación C'mon Everybody, consiguiendo ser considerado como uno de los artistas más innovadores, prolíficos y virtuosos de los primeros tiempos del Rock 'n Roll.

Tan amplia es su influencia, que entre sus seguidores y admiradores cuenta con grupos y músicos de la talla de George Harrison, The Who, Rod Stewart, Bruce Springsteen o los Rolling Stones, llegando a ser reivindicada su figura por el movimiento Punk de los años 70, como ejemplo de rebeldía e inconformismo.

El propio Sid Vicious, líder de los Sex Pistols interpretó dos versiones de los temas C'mon everybody y Something else, en el documental de 1980 de Julien Temple "The great rock and roll swindle", donde se refleja la vida de famosa banda Punk británica.


Eddie Cochran, el James Dean del Rock ´n Roll

Amigo personal de Gene Vincent y Buddy Holly, este genio de la música apagó su estrella justo cuando empezaba a despuntar.

Gene Vincent, amigo de Eddie Cochran
En 1960, cuando estaba inmerso en su primera gira europea de la mano de su amigo Gene Vincent, su popularidad empezaba a crecer incluso por encima de la de Gene.

Si bien Gene Vincent era el músico de cabecera de los conciertos, cada vez más gente se agolpaba para admirar a un Cochran que destilaba un magnetismo especial con sus movimientos sobre el escenario, su carisma y su indudable atractivo para el público femenino.

La gira europea estaba siendo un éxito realmente impresionante y el joven Eddie ganaba en cada actuación más y más adeptos a sus letras, su música y su presencia escénica que eclipsaba incluso la del por aquél entonces Rey del Rock, Elvis Presley.

Las actuaciones y las apariciones en prensa y televisión, hacían presagiar el nacimiento de la estrella más popular de la música Rock, de no ser porque un fatídico 16 de abril de 1960, el taxi donde viajaban Eddie, su novia Sharon Sheeley junto con sus amigos, Gene Vincent y Pat Thompkins para llegar al aeropuerto de Heathrow y volver a su país, sufrió un accidente estrellándose contra una farola, falleciendo únicamente él, de todos los ocupantes del vehículo. Tenía solo 21 años.


El legado de Eddie Cochran

La muerte de Cocran, hizo que su trabajo comenzase a tener un reconocimiento muy superior al que tuvo durante su corta vida, editándose multitud de grabaciones inéditas y alcanzando sus discos póstumos,  "Cherrised Memories" y "My Way", los más altos puestos en las listas de ventas de Inglaterra.

Su reconocimiento no sólo como cantante, sino como compositor, guitarrista e incluso como innovador de la producción musical nos acompaña hasta nuestros días dejándonos el regusto amargo de no saber qué cotas de perfección musical podría haber llegado a alcanzar, si el destino no lo hubiera arrebatado cuando su genio sólo había empezado a nacer.






sábado, 10 de diciembre de 2011

Cuando los grandes bandas del Rock se vuelven irrelevantes



U2. Irrelevantes los últimos 20 años
¿No os ha pasado que a veces al escuchar la música de una de las grandes bandas de Rock os habéis quedado fríos?

Me refiero a que de repente ese artista que os erizaba la piel, que hacía que vuestros ojos se humedecieran o que os levantaba el ánimo, no consigue sino generar una indiferencia que resulta extraña ya que su música siempre había ocupado un lugar preferente en vuestra discoteca.

Por lo menos a mí me sucede con una pléyade de artistas que cada vez que sacan un nuevo álbum o presentan una nueva gira, no consiguen levantarme del sillón, me dejan "estático", no me emocionan.

Esta indiferencia la generan una larga lista que encabezan mastodontes del Rock como U2, Radiohead, Metallica o R.E.M.


U2 es irrelevante, lo ha sido los últimos 20 años

Antes de que nadie suelte improperios contra las líneas de este humilde bloguero, al mentar figuras tan destacadas e incontrovertidas  permítanme que exponga los hechos partiendo de unas declaraciones que el propio Bono, figura casi beatífica y líder de U2 realizó, que pueden leer completas en el siguiente enlace, y de las que transcribo una línea: "estamos en un momento en que U2 ha llegado a ser irrelevante, de hecho ha sido irrelevante en los últimos 20 años".

Cuando me encontré con esa frase de Bono me di cuenta de que estaba expresando la realidad de una banda grandiosa con canciones inmortales como "Sunday, Bloody Sunday", "Desire" o "One", porque entre otras cosas, a partir del disco Achtung Baby editado en 1991 y a la que pertenece la última de las mencionadas, U2, no ha vuelto a tener en su repertorio ningún otro tema que merezca ocupar un lugar entre aquéllos que pervivirán más allá de nuestra propia existencia.
Metallica ha ido en descenso desde su Black Album

Perdónenme los fans de la banda de Dublín, pero sigo afirmando que lo único que han sabido hacer en los últimos tiempos, son giras grandiosas amparadas en fórmulas de éxito repetidas hasta la saciedad y bajo el paraguas de una promoción publicitaria sólo al alcance de unos pocos.

Cuando escucho, porque sigo comprando sus discos en el ánimo de que algo va a cambiar, cualquiera de sus nuevas canciones, me sucede lo mismo que cuando voy a ver al cine la última gran superproducción americana: "me quedo frío".
Y es que sólo veo un alarde de efectos especiales que enmascaran un argumento frágil y a unos actores, en el mejor de los casos, mediocres.
Prefiero el plano inicial de "Sed de Mal" del maestro Welles a la suma de todas las producciones en 3D plagadas de efectos especiales que inundan las salas de cine.

Con la música sucede lo mismo, hay artistas que generan éxitos "como churros", pero estos éxitos están huecos, no emocionan si eliminamos los fuegos de artificio que los adornan.


Las bandas de Rock y los artistas tendrían que saber retirarse a tiempo

Creo que la frase pronunciada en la película Llamad a cualquier puerta, por John Derek, "vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver", adquiere vigencia en el tema tratado.
Radiohead, una banda con poco que decir

Míticas bandas como The Doors, The Eagles, Cream o The Beatles, son lo que son, porque ya no existen.

Todos los grupos de Rock tienen una vida, le pese a quien le pese y en mi opinión, cuando por la razón que sea pierden su instinto, su originalidad, han de desaparecer, porque enrocarse en fórmulas de éxito y en la creación de subproductos, hace que acaban convirtiéndose en una mera parodia de sí mismos.

Seamos francos, hay bandas que resisten 20 años y otras que con 5 tienen suficiente, solo hay que ser consciente de que nada es para siempre.

REM se separó en 2011
Por suerte hay todavía bandas como R.E.M. que anunciaron su separación este mismo año, que han sabido tomar el camino correcto, aunque quizás un poco tarde porque desde Automatic for the People, la banda fue cayendo en barrena.

Y es que a veces un cambio de imagen como en el caso de Metallica y sus prescindibles discos Load y Reload o los ímprobos intentos de Thon Yorke por mantener a Radiohead como una banda de culto, no son suficientes.

La música es algo más que imagen, se trata de emociones y de sentimientos; y cuando estos no surgen de forma natural, es que algo falla dentro de la banda y es conveniente tomar un nuevo rumbo.







viernes, 9 de diciembre de 2011

No toda la música es arte

    
    Ayer, mientras volvía de mi trabajo, me decidí a situar el dial en la radio de mi coche sobre una de las emisoras musicales con más audiencia del panorama nacional.

Música
Reconozco que respecto a la música soy un poco snob, si esa es la palabra que me define, pero lo cierto es que generalmente reniego de la superficialidad que viene acompañando a la música comercial, con lo que hace más de una década y si de mí depende, me niego a sintonizar las radiofórmulas de éxito.
Y es que la música que actualmente triunfa, tiene la consistencia y la utilidad de un kleenex; es decir, se usa una vez y después se desecha sin más contemplaciones.
Es más, gran parte de los éxitos actuales si nos referimos al universo musical, carecen de sentido si no se acompañan de bamboleantes formas femeninas o de cuidados y esculturales cuerpos de efebos que nos saturan una y otra vez con letras simples y melodías gastadas.

Robert Johnson
Yo siempre entendí que la música ha de entrar por el oído, no por la vista; o es que acaso tienen menos valor las canciones de un autor cuya belleza física es cuando menos cuestionable, como puede ser el caso de Dylan o Jagger.

Pero más allá de consideraciones estilísticas y sesudos estudios acerca de las armonías o la calidad compositiva e interpretativa de los músicos, existe algo que diferencia a cualquier expresión artística del resto de actividades humanas y es simplemente, la capacidad que poseen de despertar en el receptor de las mismas, una serie de sentimientos y emociones; y esta es una cualidad que no logro encontrar en la mayor parte de las propuestas musicales que se consideran "de moda".

Y observe el lector que me estoy refiriendo a un sector musical muy concreto, que podríamos definir como música popular o quizá como música Rock entendida en sentido amplio, que le pese a quien le pese, engloba, determina e influye en la mayor parte de las expresiones artísticas y culturales que se han desarrollado en el siglo XX.

Aparte de lo anterior, creo que la calidad de una obra, en este caso musical, también tiene otra característica fundamental, y es la capacidad de envejecer de tal modo que se acabe convirtiendo en un clásico.
The Beatles
Me explico, a mí me sigue emocionando el Starway to Heaven de Led Zeppelin o el Knockin' on Heaven's Door de Dylan a pesar de que ambas composiciones datan de 1971 y de 1973 respectivamente, años en lo que mi persona ni siquiera era un proyecto.

Qué canción de las actuales resistirá el paso del tiempo como los clásicos antes mencionados. La respuesta es evidente, casi ninguna.
En 40 años nadie recordará el meneo de caderas de Shakira o las excentricidades de Lady Gaga, pero me juego el pescuezo a que se seguirá escuchando el "Sgt Pepper's Lonely Hearts Club Band" de The Beatles, el "Made in Japan" de Deep Purple o las famosas 29 canciones que nos dejó RobertJohnson en los años 30 del siglo pasado.

Esto me lleva a una reflexión, que parte de la base de la gente que pregona como un axioma incuestionable que la música es cultura, pero siendo objetivo, no toda la música es cultura ni mucho menos, arte.
No son comparables mis garabatos sobre un folio en blanco con los que desarrolló Picasso, Dalí o Munch; los míos son un mero entretenimiento sin valor, los demás son obras de arte incontrovertidas y marcadas por la capacidad de crear emociones.
Fender Stratocaster 
de Jimi Hendrix
Del mismo modo, no podemos comparar la influencia de Hendrix en los músicos posteriores, el virtuosismo de Steve Vai o el increíble tándem compositivo que formaron Lennon y McCartney con la vacuidad de "músicos" como Pitbull o subproductos similares que perecerán cuando la moda determine que debe dar un giro en otro sentido.

No se equivoquen, considero que todas las propuestas tienen su cabida, pero no todos los productos musicales tiene la misma calidad ni han de tener la misma consideración.

Si el lector ha sido capaz de llegar hasta estas líneas, se dará cuenta de que en ellas se refleja una declaración de intenciones con respecto al sentido que pretendo imprimir a este blog.

Espero escribir sobre grandes artistas, músicos y personalidades atemporales cuyas composiciones trascenderán a nuestras propias vidas y que serán escuchados, estudiados y admirados por generaciones que aún están por llegar.

Eso sí, como declaro en la descripción de esta página, tu opinión será bienvenida porque mi pretensión es que este sea un foro abierto.

Por ello, doy la bienvenida a cualquiera que desee acercarse a una de mis pasiones, la música.